En Leymark Somos así de contundentes, nuestra experiencia definiendo estrategias de marketing así nos lo ha demostrado. Más allá de la teoría, partimos de una premisa muy básica:
Cuanto mejor conozcamos a nuestros clientes, mejor sabremos venderles
Piénsalo por un momento, ¿quién mejor que alguien cercano a ti para recomendarte el producto que necesitas? Quien bien te conoce, sabe tus gustos, necesidades, hábitos, etc. y es capaz de recomendarte exactamente aquello que necesitas y además, confías completamente en su criterio.
Pues esto es lo que debemos tratar de hacer con nuestra audiencia. La complicación es que no son tan cercanos a nosotros y el volumen de personas es enrome.
En muchos casos se definen planes de marketing en base a supuestos (“yo conozco perfectamente quien es mi cliente”) y en otras se hace una descripción superficial.
El problema que tiene esto, es que vamos a basar nuestra estrategia, la propuesta de valor, nuestros procesos,… ¡todo! con una información poco exacta y poco detallada. Una información que no nos saca a relucir las motivaciones reales de nuestra audiencia, que no nos va a dar las claves que necesitamos.
Suelo decir, que si hacemos una correcta definición del perfil de audiencia, tenemos el 50% de nuestro plan de marketing hecho. Hemos definido la aportación de valor del marketing al negocio, hemos descrito a nuestra audiencia, hemos encontrado la propuesta de valor que hará que se decidan por nosotros antes que por la competencia y finalmente, hemos descrito el proceso de decisión de compra y los pasos a seguir para convencerles de que pasen a la siguiente fase (les estamos acompañando en ese proceso de toma de decisiones).
Para hacerlo he definido una metodología que combina los elementos necesarios para hacerlo correctamente. Muchas de esas cosas las he explicado en este blog por separado, pero nunca le he dado la visión completa.
Comments